Mientras el pueblo oriental recorre calles y caminos en pos de la alegría de votar, en las horas en que está prohibida la propaganda política y cuando no se sabe quién habrá de ganar las elecciones, RADIO CLARÍN siente, junto a los ciudadanos de todos los partidos y todas las ideologías, que gane quien gane en las urnas, nuestro deber es y será siempre el mismo: defender a la persona, defender la libertad, inspirar el bien individual y colectivo, apoyar el sistema democrático-republicano y defender la Constitución.

         La Constitución es un sistema de convivencia bajo normas claras. Fue trabajosamente forjado por esfuerzos donde grandes orientales  conjugaron pensamiento, experiencia y coraje cívico para definir las avenidas del porvenir. Por eso, nos llama a vivir cada día desde valores que están antes y más allá del triunfo o la derrota comicial. .  

         La Constitución surge de la lucidez intelectual de sus redactores y brota en los corazones y el reclamo de una inmensa multitud que siente el Derecho y la justicia, aunque no maneje las palabras de la ley. 

         Nuestro régimen constitucional se funda en la persona humana y sus derechos, deberes y obligaciones, que expresamente se consideran anteriores al propio texto de la Constitución. Cada persona tiene un valor irremplazable e irrepetible. Y toda persona, por humilde y aun desventurada que sea, puede abrazar actitudes y misiones inspiradas en valores altos que la sostengan y realcen.

.        En la visión constitucional de toda persona, todo ser humano está abierto a lo universal, es hermano de su prójimo y es portador de luz que genera el renacer constante de sentimientos e ideas que nutren todo el ser nacional y se reflejan en poemas y melodías que reflejan valores y permiten a cada uno construir su  filosofía de vida.

         Ni el folklore ni el tango nacieron como parte de la industria del entertainment ni como juguete de un gobierno o un partido.

         En definitiva, la misión de RADIO CLARÍN no depende de quién gane o quién pierda en las urnas, porque pertenece al plano de lo que los seres humanos tenemos invariable y en común. Nuestra misión es servir a la condición humana en su esencia.

         En una América que no logra consolidar su rumbo, en un mundo amenazado por guerras que en estas mismas horas tienden a  multiplicar los horrores de sus matanzas, y en un contexto donde lo impersonal e inhumano de la máquina viene aniquilando el espíritu humanista, la radiodifusión libre tiene el compromiso de inspirarnos y sostenernos como personas. Ese compromiso es lo que nos da esencia y alma, como personas y como servicio privado de interés público.

         En tiempos en que lo universal humano vuelve a estar en peligro, nos renace a todos la responsabilidad de, a pesar de todo, erguirnos para el bien de lo que vendrá.        

         Así lo siente y así lo afirma Radio Clarín.