Los resultados oficiales del balotaje cumplido ayer, tal como los estableció en esta madrugada la Corte Electoral, le certificaron a Yamandú Orsi y Carolina Cosse un total de 1:196.798 votos y a Álvaro Delgado y Valeria Ripoll, un total de 1:101.296 sufragios.

La diferencia fue 95.502 votos.

En proporción, Orsi y Cosse alcanzaron el 49,84 % de los votos y, en cambio, Delgado y Ripoll lograron 45,87 %, es decir, tres puntos con sesenta y siete menos.

Las cifras del balotaje tuvieron signo diverso del que marcaron los números de la primera vuelta. En la votación de octubre, sumando los votos la coalición obtuvo 90.000 voces más que el Frente Amplio. En cambio, en la segunda vuelta, los candidatos del Frente Amplio lograron 95.000 votos más que la coalición.

El pronunciamiento de las urnas fue contundente. Sin esperas, sin recuento voto a voto, sin cabeza a cabeza, en el balotaje el Profesor de Historia Yamandú Orsi se consagró, por clara luz, Presidente de la República llamado a asumir el 1º de marzo, con la Ingeniera Carolina Cosse como Vicepresidenta de la República, también desde el 1º de marzo, y como Presidenta de la Cámara de Senadores a partir del 15 de febrero.

Anoche mismo, el Presidente Luis Lacalle Pou llamó a Orsi, lo felicitó y le ofreció una transición ordenada. El gesto no fue ni casual ni excepcional: confirmó un hábito connatural a la manera nacional de vivir nuestra democracia, respetando la soberanía popular y reconociendo en el adversario triunfante a un conciudadano ungido legítimamente por el pueblo y no a un enemigo que se alza con un botín de guerra.

Esa sensibilidad no debe expresarse sólo para entregar el poder derechamente, sin remedar a los países donde los gobernantes ocultan las actas electorales o los Presidentes insultan a los opositores.

Esa sensibilidad debe extenderse a nuestra vida diaria, donde todos debemos ser protagonistas y fiscales a la vez.

Si en el mundo los pueblos se distraen y la democracia cruje con intentos fascistoides, nosotros aquí en nuestro Uruguay debemos profundizar nuestra conciencia de libertad, fortaleciendo nuestra capacidad de discurrir en voz alta, sin miedo a plantear nuestras coincidencias y nuestras discrepancias, seguros de que hay caminos nobles y racionales para entendernos por encima de la estrecha clasificación en derechas e izquierdas.

Esos caminos corresponden al sentimiento de una República de ciudadanos libres, que es lo que quiere y debe ser siempre la República Oriental del Uruguay.

Así lo siente y así lo afirma Radio Clarín.